jueves, 13 de marzo de 2014

          ALFONSINA STORNI: UNA MUERTE AUTOANUNCIADA

     Alfonsina Storni Mantignoni, nombre completo de la genial poetisa nació en Suiza un 29 de mayo de 1.892.
      Tras el regreso a la Argentina en 1896 su padre instaló un café junto a la estación Rosario Central y su madre una escuela domiciliaria, algo normal en la época, y debido a la escasez de Centros educativos. Durante un tiempo Alfonsina colaboró con su padre en el negocio familiar, actividad no grata para la poetisa. Tras independizarse consiguió su primer empleo como actriz, recalando en varias provincias en una gira teatral.
   Ejerció como maestra en diferentes centros educativos, siendo este periodo donde escribiría la mayoría de sus poemas y obras de teatro.
   La obra de Alfonsina Storni nunca estuvo en los textos españoles hasta la muerte del dictador Franco, poco dado a ensalzar la figura de la mujer (excepción hecha de Emilia Pardo Bazán), y más proclive a ensalzar los valores patrióticos. Sí estaba Ruben Darío, y es fácil entender porqué con un simple ojeo a su obra.
    Es durante la Transición, en plena “canción protesta” cuando escuché a la India, (Mercedes Sosa). La canción se llama “Alfonsina y el Mar”y en ella se narra la forma un tanto romántica de la muerte de la poetisa. Desde ese momento me sentí atraído y aún hoy me intrigan sobremanera los motivos que le llevaron a tan fatídica decisión.
   Si bien su prosa es feminista, pues busca la igualdad entre el hombre y la mujer, hay quienes dividen su obra en dos partes: la primera, de corte romántico y que trata el tema desde un punto de vista erótico y sensual, y con ciertos rasgos de misoginia, y una segunda etapa, donde se aparta de lo anterior, acercándose más a lo abstracto y reflexivo. Todas sus composiciones delatan la enfermedad que padeció, resignándose, esperando el final, expresándolo en forma de miedo, dolor y un profundo sentimiento de amargura. Su poema “Alma desnuda” es ciertamente clarificador:

                          Soy un alma desnuda en estos versos, 
                       Alma desnuda que angustiada y sola 
                      va dejando sus pétalos dispersos.
 
   Pero lo es aún más en su composición “ ¡Adios! “:

                       Las cosas que mueren jamás resucitan,
                       Las cosas que mueren no tornan jamás.
                       ¡ Se quiebran los vasos y el vidrio que queda
                       Es polvo para siempre y siempre será ¡

  Fue diagnosticada y operada de cáncer de mama. Tras la petición de un estudio quiromántico por parte de un periódico, el diagnóstico no fue positivo, lo que la sumió en una profunda depresión, cambiando radicalmente  su carácter, llegando incluso a negarse al tratamiento para su enfermedad.
  Se suicidó en Mar del Plata, arrojándose a la escollera del Club Argentino de Mujeres, aunque la versión popular y romántica sostiene que se adentró lentamente en el mar.


3 comentarios:

Unknown dijo...

Es una de mis poetas favoritas, yo también escribí sobre ellaen un blog, con tu permiso:


Vida
Mis nervios están locos, en las venas
la sangre hierve, líquido de fuego
salta a mis labios donde finge luego
la alegría de todas las verbenas.

Tengo deseos de reír; las penas
que de donar a voluntad no alego,
hoy conmigo no juegan y yo juego
con la tristeza azul de que están llenas.

El mundo late; toda su armonía
la siento tan vibrante que hago mía
cuando escancio en su trova de hechicera.

Es que abrí la ventana hace un momento
y en las alas finísimas del viento
me ha traído su sol la primavera.

Alfonsina Storni

Unknown dijo...

Resumir en unos minutos una vida intensa de amor, gloria, enfermedad, poesía, miedo...recorrer la percepción introvertida de su sentir, el dolor, el anhelo de amar, de ser amada, de vivir, de morir...mi admiración infinita para ésta poetisa y escritora.

Juan Luis dijo...

Es una mujer que lo tuvo difícil, pues en su tiempo, la cultura estaba reservada a los hombres, y sus coetáneos le hacían un vacío casi insoportable.
Gracias por este grano de arena, porque, con toda su poesía conforma una duna.